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Mi viaje vegano

 Sisters of St. Joseph of Carondelet

Hands holding a large bowl of mixed vegetables and grains

Por Kathy Fisher

The beginning of my vegan journey started in the spring of 2016 after watching the documentary Forks over Knives. The title of this program depicts in three words the content and good news that to me was

El comienzo de mi viaje vegano se inició en la primavera de 2016 después de ver el documental Tenedores Sobre Cuchillos. El título de este programa describe en tres palabras el contenido y la buena noticia que para mí fue profunda: al cambiar lo que pones en tu plato, puedes evitar enfermedades que podrían evitar llevarte a un cirujano.

En ese momento de mi vida estaba trabajando en una práctica de cardiología como enfermera practicante. Me enseñaron que la enfermedad de las arterias coronarias es progresiva y que lo mejor que podía hacer era controlar la enfermedad con medicamentos y ejercicio, para que no empeore. Me fascinó escuchar en el documental que comer una dieta basada en plantas sin procesar en realidad puede revertir la enfermedad cardíaca. Así que me enganché y comencé a leer, investigar y practicar este modelo en mi vida personal.

En septiembre de 2017, asistí a una Conferencia Internacional de Salud de Nutrición Basada en Plantas. Me emocionó aprender sobre Médicos para la Medicina Responsable, que están trabajando para dar las buenas noticias, no solo a las personas que desean evitar enfermedades o aquellas con enfermedades crónicas, sino también para educar a los médicos para tratar la causa raíz de la enfermedad en lugar de solo tratar un síntoma con píldoras. Muchos estados de enfermedad comienzan con inflamación y muchos de los alimentos (o debería decir sustancias similares a los alimentos) que comemos causan inflamación. Al cambiar a alimentos integrales y plantas, permitimos que nuestros cuerpos se curen de adentro hacia afuera.

Lo que más me ayudó a empezar fue:

  1. Cocinar en casa y deshacerme de la comida que para mí era tentación.
  2. Mantener una comida simple, evitar recetas e ingredientes complicados y mantener esos alimentos como abastecimiento.
  3. ¡Cocinar por remesas! No puedo enfatizar esto lo suficiente porque el comer alimentos reales en lugar de sustancias similares a los alimentos manufacturados lleva tiempo. La cocción por remesas mantiene los alimentos listos, por lo que la preparación de las comidas es simple y rápida.
  4. Encontrar apoyo.

Entré en este estilo de vida para ser más saludable, pero cuanto más aprendo sobre los efectos que la adopción de una dieta basada en plantas puede tener en el medio ambiente y otros seres racionales, más comprometida me vuelvo. Para mí es una noticia tan alentadora… Tengo más esperanzas sobre el envejecimiento, a pesar de un sistema de salud roto. Ahora tengo más control sobre mi salud y puedo evitar condiciones debilitantes. ¡También puedo ser parte de la solución para sanar nuestro mundo!

Nota: hay una gran diferencia entre ser vegano y estar basado en plantas sin procesar (WFPB). Soy 100% vegano, pero me esfuerzo por ser WFPB, como discutí anteriormente. Ahí es donde ocurre la magia hacia la salud. Por ejemplo, una papa frita es vegana pero no WFPB porque se procesa y se carga con aceite y sal, por lo tanto, no cosechará las recompensas de revertir o evitar la enfermedad. Cada paso en este viaje dondequiera que uno se conecte a él es emocionante … pero menos aterrador cuando hay apoyo. Estaría encantada de compartir cualquier recurso, receta o truco que haya aprendido en el camino.

Receta recomendada

Ensalada de garbanzos por Caitlin Shoemaker, From my Bowl

Me encantan los sándwiches, y esto es algo para lo que siempre tengo ingredientes, así que puedo prepararlos en poco tiempo.

Kathy Fisher es una asociada de nuestra provincia de San Luis. Es una enfermera PRN y sirve en el equipo de Salud y Plenitud de la provincia.

Pregunta de reflexión

¿Qué tiene de atractivo una dieta vegana? ¿Qué me repele?

Comparta su opinión en un comentario a continuación.

Category: Noticias

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The Sisters of St. Joseph of Carondelet are a congregation of Catholic sisters. We, and those who share our charism and mission, are motivated in all things by our profound love of God and our dear neighbors. We seek to build communities and bridge divides between people. Since our first sisters gathered in 1650, our members have been called to “do all things of which women are capable.” The first sisters of our congregation arrived in St. Louis, Missouri in 1836, and we now have additional locations in St. Paul, Albany, Los Angeles, Hawaii, Japan and Peru. Today, we commit to respond boldly to injustice and dare to be prophetic.

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